miércoles, 13 de febrero de 2013

A celebrar Se Ha Dicho junto a Mónica Fernández


El programa arriba a su primer año al aire

El programa, que se ha convertido en una ideal mezcla de entretenimiento y educación legal básica para convivir en sociedad, arriba a su primer año al aire. Su rendimiento en rating ha sido consistentemente óptimo, dejándole un excelente “lead in” a la programación estelar TELEVEN, siendo uno de los programas más vistos de esta televisora.

Se Ha Dicho, que se transmite por Televen, de lunes a viernes a las 6 de la tarde, es el líder absoluto en las ciudades del interior del país como Barquisimeto, Maracaibo y Valencia en las que promedia más de 40 puntos de share. Ha logrado identificarse con las clases D y E.

El Código penal,  La LOT, La Ley de Propiedad Horizontal, el Código Civil, se han vuelto normas mucho más comprensibles para el ciudadano común, que observa en Se Ha Dicho su aplicación mediante casos reales. Se Ha Dicho, es la mezcla ideal de la diversión que mantiene el rating y educación legal, con la cual Televen cumple con su misión de educar.

Fuera de la pantalla, ofrece a sus seguidores en Twitter a través de las cuentas @SeHaDicho_TV y @MoniFernandez, información relacionada con las leyes, normativa legal, atención de casos, interacción, recomendaciones legales.

Su productora general Johanna Chacón, informa sobre el contenido del programa aniversario que se transmitirá este jueves 14 de febrero, en su horario habitual de las 6 de la tarde: “tendremos un solo caso que tratará de una pareja mayor que viene a realizar en el estudio su renovación de votos. Habrá un recuento de lo más impactante de este primer año, tendremos a Omar Acedo como invitado y el toque de humor lo pondrán los artistas de Dulce Amargo, así como  conductores de La Bomba, Vitrina, Chataing, y Hay Corazón, quienes plantearán divertidas demandas a la doctora Mónica”.

Mónica Fernandez, conductora de este especio, nos comenta cómo le ha cambiado la vida el conducir este programa, sus planes, anécdotas y demás reflexiones.

¿Cuál ha sido la mayor satisfacción de este primer año al aire?

MF: La principal es habernos diferenciado de todos los programas similares. Al principio siempre había la duda si éramos imitación y creo que desde los primeros meses pudimos diferenciarnos claramente. Eso nos ha dado la posibilidad de ayudar a muchísima gente, por correo, por twitter, en persona, con los casos, etc.

¿Cuál ha sido el mayor tropiezo de este primer año?

MF: No creo que sea tropiezo, he tenido mucho aprendizaje, es decir yo desde el primer programa del 14 de febrero del 2012 no soy la misma del 14 de febrero del 2013, creo que ha habido un crecimiento desde el punto de vista de la parte técnica, de lo que es saber sobre qué estamos haciendo, los tiempos las cámaras las luces, los ángulos qué decir, qué hacer, un poco ser reguladora de lo que uno dice y de lo que los demás dicen, entonces no ha sido tropiezo, ha sido una escalera que he ido subiendo adecuado al punto de sentirme absolutamente cómoda con lo que estoy haciendo.

El caso que más te ha impactado o que más te ha movido fibras…

MF: Uno de los casos que todavía estoy litigando, aún no ha salido en televisión pero un caso de una persona que me escribía por twitter, un muchacho de 15 años y yo no le creía, le contestaba como lo hago con todo el mundo: escriba su caso a los correos de Se ha Dicho. Mandó el correo como 10 veces y me volvió a escribir por twitter, entonces lo cité con un representante al canal y cuando lo vi me impactó, porque es un abogado que le hizo firmar a su mamá un poder amplio, sin limitación alguna, y ese abogado les vendió el apartamento de ellos en El Valle, no les dio el dinero, y llegó una gente y les dijo vete de aquí, este apartamento es mío. Ellos están viviendo en un anexo de un taller mecánico. Yo estoy llevando la parte penal porque te impresiona mucho y dices: ¡Dios mío cómo un abogado hace esto!

El caso más difícil de resolver…

MF: Para mí son muy difíciles los casos que tienen que ver con infidelidad, porque uno trata de pensar: yo no soy mujer, yo no siento, yo aquí soy imparcial y objetiva pero me parece que son casos como muy descarados donde las mujeres se dejan faltar el respeto, no se respetan, no se quieren y te sales de lo legal para trabajar más como psicólogo, entonces tiendo a ser como más dura.

El caso que se presenta con mayor frecuencia…

MF: Las deudas, de hecho llevamos una estadística y es sorprendente, los casos de las deudas son impresionantes, aquí nadie paga, todo el mundo presta plata y nadie paga, los casos de inquilinato y los casos de padres que no pagan manutención de los niños y madres que manipulan a los padres al no dejarlos ver a sus hijos. Esos son los casos que más se repiten.

Luego de presentar los casos y dictar la decisión, ¿le hacen seguimiento?

MF: A algunos se les hace seguimiento, porque nosotros estamos absolutamente claros que esto depende de la voluntad de la gente y eso nos diferencia de otros formatos. Aquí hay un acuerdo entre partes, si las partes quieren cumplir, con la buena voluntad cumplen, sino quieren, entonces pueden ir a tribunales y Se ha Dicho le puede servir como prueba.

¿Crees que exista algo que mejorar del programa y de tu desempeño?

MF: Siempre hay que mejorar, eso es importante, nosotros hacemos reuniones de producción constantes, porque ser el programa más visto de las 6 de la tarde es un reto grandísimo y siempre buscamos mejorar. Y en cuanto a mí, yo puedo ser muy lapidaria hacia mí misma, yo lo grabo y lo veo todos los días en mi casa, lo veo como televidente y como crítica. Y empiezo, no me gusta esto, te excediste en tal cosa, fuiste muy blandita en esto, debiste decir tal cosa de tal código y voy anotando. Y al día siguiente lo comento con mi productora y le digo contrólame esto. Pero siempre estoy en una constante revisión, desde lo físico, lo intelectual, la dicción, por ejemplo me empecé a dar cuenta que me comía las “S” y estoy tomando clases de dicción, para mejorar.

Luego de un año al aire, ¿no se agotan los casos?

MF: No que va, esto no se agota (risas). Lo que me impresiona y es el punto de más reflexión, es que la gente necesita justicia, cuando yo hoy tengo mil correos  para responder, primero que nos desbordamos de la propia capacidad, de hecho la universidad Santa María nos pidió que sus estudiantes hicieran pasantías en el programa, respondiendo correos, ayudando a la gente que nos llega aquí al canal.

En el fondo nos preguntamos dónde está la justicia para los problemas cotidianos, no hablo de los grandes problemas como homicidios, secuestros, estafas, pero el día a día, el problema con los perritos en la vecindad, el problema que chocaste y no me has reparado el daño. Para mí esos problemas chiquiticos que toda esta gente tiene, y no puedo resolver, creo que es lo que te impide poder ocuparte del resto porque cuando la gente no resuelve sus problemas, termina cayéndose a golpes, entonces lo que está detrás de eso es ese mensaje.

¿A quién le agradeces este año de grandes logros?

MF: Primeramente a Dios, infinitamente, porque esto es una oportunidad demasiado valiosa y trascendente es una gran responsabilidad lo que estoy haciendo, el mensaje que estoy enviando a la gente tiene mucho peso entonces es una gran responsabilidad.

Obviamente a la directiva del canal porque pudo ser cualquier otra persona y se puso esta gran responsabilidad en mí y eso tiene que ser agradecido.

A mi equipo, yo tengo un equipo maravillosamente comprometido y eso yo lo decía desde el primer día y un año después, mira, aquí todo el mundo está metido en esto, aquí atienden a la gente afuera con el mayor de los cariños, hay gente que se colea en el público para presentar casos y ellos con la mayor de las paciencias los atienden, atienden las llamadas telefónicas, es un equipo muy valioso.

Hay que agradecer a la audiencia que ha sido absolutamente maravillosa y receptiva. A diario, recibo mucho cariño  de la gente,  bendiciones, agradecimientos. Esos mensajes yo los guardo como algo muy especial porque me hacen sentir súper feliz. 

Agradezco a los medios, fíjate yo le tenía mucho temor a una fuente que yo no conocía, que es la de farándula, yo venía de sucesos y política, llegar a esta fuente era una gran incertidumbre para mí, pero puedo afirmar que este ha sido un año de muy positivos comentarios, todo el tiempo, inclusive las columnas que son anónimas. Yo el otro día decía: ¡no sé quién es El Sepulturero pero lo quiero!, porque todo lo que dice es positivo, la sección de la revista Ronda del Té de Doña Linda, todo es positivo. Entonces eso se valora porque siento que hay un respeto hacia ellos y de ellos hacia uno. Valoran el trabajo de uno y no ha habido alguna crítica que uno pueda decir: ¡qué maldad eso!. Ha sido muy bien manejado, inclusive hasta el respeto por la forma en como han tomado mi relación de pareja, ha sido muy positivo y eso uno tiene que agradecerlo.

Julio Borges tuvo un programa de corte muy parecido a Se ha Dicho que le sirvió de trampolín para llegar a la Asamblea como diputado. ¿Ese es el pensamiento de Mónica? ¿Quisieras llegar a la Asamblea?

MF: Uno nunca sabe a dónde va a llegar y por eso uno no dice ni sí, ni no, porque de alguna manera yo he llegado a los sitios que he llegado siempre por coyuntura, igual que llegué aquí. En cualquier cargo que yo me encuentre tengo como filosofía de vida ayudar a la gente, pero no es que está trazado como una meta, eso no lo he planificado.
¿Quién resuelve los casos en tu vida personal?

MF: Yo, (risas), yo pero sin mazo. Ahí es más complicado, porque es como dice el dicho: no puedes ser juez ni parte.

¿Cómo ha cambiado tu vida este último año?

MF: Como ya yo venía de una carrera muy pública, entonces quizás desde los 23 años yo tengo muy poca vida privada. Yo no he cambiado desde ese entonces hasta ahora en absolutamente nada, además le digo a la gente si alguien ve que yo cambio o me pongo diva, o me pongo lentes oscuros para pasear en un centro comercial,  háganmelo saber (risas), pero no, yo estoy muy clara, yo sigo siendo exactamente la misma de siempre. Obviamente la gente me conoce más y es muy divertido, puede ser muy invasivo pero me saludan con mucho cariño, resuelvo casos en el supermercado, estoy en una peluquería y me consultan, pero yo soy exactamente igualita.

En tu caso, ¿aplica el dicho que dice: casa de herrero cuchillo de palo?

MF: No, yo creo que tengo una vida conforme a lo que profeso. Mi vida es muy tranquila no tengo conflictos con nadie, los que tengo los dialogo, no es que no tenga problemas, eso tenemos todos, pero sí creo que en mi entorno hay mucho diálogo y capacidad para hablar.

Una ley que a Mónica le cueste cumplir…

MF: No, yo cumplo la ley, pago los impuestos, pago condominio, me porto bien (risas). Yo creo que trato de cumplir la ley de Dios y la ley de los hombres, sin ser perfecta, pero me saqué mi licencia pidiendo mi cita, me saqué mi pasaporte pidiendo mi cita (risas).

La ley que nunca infringirías…

MF: Creo que ninguna pero sobre todo algo que tenga que ver con lesionar la integridad física de la gente. Para mí la vida tiene un valor adicional, al que puede tener el de cualquier persona.

¿Quién ha sido tu mejor ejemplo a seguir?

MF: Mi mamá. Es una mujer muy justa y muy dura también.

Eres muy familiar, ¿quién es esa persona de tu familia, por la que sientes un cariño muy especial?

MF: Nosotros somos una familia súper unida, yo diría que todos estamos juntos para todo. Durante los primeros 100 programas uno de mis hermanos vio los 100 programas y los evaluaba del 1 al 10 y me iba creando un récord donde llevaba una estadística y todo. Cuando llegó al programa 100 me dijo listo, ya estás lista, ya no tengo nada que decirte. Somos muy unidos todos pero obviamente, a mi hija, con ella tengo una relación maravillosa, creo que lo más cercano a mí es ella y creo que ha crecido con un absoluto sentido de justicia…

Eres muy exitosa en el plano profesional. ¿Lo eres igual en el sentimental?

MF: Si, de verdad que sí, yo no me puedo quejar, siempre digo que estoy como bendecida, definitivamente.

Yo fui la primera del colegio, la de las excelentes notas en la universidad, los postgrados, pero no tenía como una pareja estable y eso también llegó este año y en conjunto es como una vida bien feliz, ahora tengo mi pareja, tenemos ya seis meses juntos, nos llevamos muy bien, respeta mi trabajo y lo complementa, Enrique sabe demasiado de televisión porque tiene bastante años en esto y me ayuda. Creo que uno de los momentos más felices de mi vida ha sido este último año.

¿Tiene planes de boda Mónica Fernández? ¿Cómo ha sido la relación con Enrique?

MF: Lo contestamos el otro día, no hay fecha, pero hay planes, es decir es una relación seria, donde las familias están comprometidas, tanto él con mi familia, como yo con la suya, hay absoluta participación en los eventos familiares de ambos, hay una relación bien estable y cuando hay una relación estable, pues se supone que es serio, y que si es serio, debería seguir los pasos, no sé si del matrimonio como tal, pero sí ha habido conversaciones serias sobre un futuro.

En una discusión de pareja ¿también es Mónica la que tiene la última palabra y con mazo en mano dice ¡Se ha Dicho y punto!?

MF: Esa hay que preguntársela a Enrique (risas). No, pero sí hay algo cómico porque a veces Enrique me dice: no estás en el programa. Yo justamente ayer le decía que es una malformación profesional, yo he estado toda mi vida interrogando, entonces él me echa un cuento y yo sin querer lo interrogo. Llega un momento en que sin querer tu vida personal es tu vida profesional. Pero Enrique es un hombre demasiado pacífico, de diálogo y comprensión.

En el programa tienes un carácter fuerte e incisivo. Fuera del set, ¿Mónica es igual?

MF: Sí, yo soy así, lo mío no es un papel, yo soy así. Pero también soy echadora de broma, soy sarcástica, soy fuerte, también me conmuevo.

¿Siempre son así de serios los Poli Se Ha dicho?

MF: Los policías de Se ha Dicho han resultado ser unos maravillosos muchachos, ellos son de verdad así, y yo he explotado mucho su propia personalidad en los casos, Hernández es como el pícaro y Rondón es el bueno, él es así como más filosófico, sin embargo, Hernández es más pragmático.

¿En las grabaciones ha salido maltratado alguno de los Poli de Se ha Dicho o del equipo de producción?

MF: No, un día empujaron a Rondón, se armó una pelea que hasta a los muchachos se les cayeron las chapas y ayer que hasta yo brinqué porque pensé que se iba a armar algo feo, y de hecho hasta rompieron un contrato pero no, lesiones y eso no. El perfil de gente que ha venido, de alguna manera siente respeto. Se ha controlado sin mayores daños para nadie.