La Jueza de la televisión venezolana se prepara para los carnavales
La
encargada de poner orden en la sala en “Se ha Dicho”, el programa más
visto a las 6 de la tarde, Mónica Fernández, se prepara para
pasar estos carnavales junto a sus familiares y sobrinos. “Me quedo
disfrutando de mis cuatro sobrinos que los van a disfrazar y haremos
cosas familiares.”
La exitosa jurista, recuerda todos sus carnavales con emoción: “Toda
la vida he tenido buenos carnavales porque desde chiquitos
nos disfrazaban a mi hermano y a mí y nos llevaban a Los Próceres, era
súper divertido, yo recuerdo Los Próceres como parte de toda mi
infancia”.
¿Qué planes tienes para estos carnavales?
MF: En
carnavales me quedo aquí en Caracas, no me gusta viajar en época de
carnavales porque hay mucha gente. Me quedo disfrutando de
mis cuatro sobrinos que los van a disfrazar y haremos cosas familiares.
¿En carnavales prefieres viajar a la playa a la montaña o quedarte en casa?
MF: A
veces íbamos a Puerto La Cruz, pero ahora es más complicado porque hay
más inseguridad, más cola, entonces de repente uno prefiere aprovechar
Caracas
que se queda sola e ir a alguna plaza en donde los niños puedan ir
disfrazados y disfrutar.
¿Cuáles han sido tus mejores carnavales?
MF: Toda
la vida he tenido buenos carnavales porque desde chiquitos nos
disfrazaban a mi hermano y a mí y nos llevaban a Los Próceres, era súper
divertido,
yo recuerdo Los Próceres como parte de toda mi infancia y ahora nos toca
a nosotros llevar a los chiquitos de la casa a otras plazas. Pero
siempre mis carnavales fueron muy felices porque además en el colegio
hacíamos como concursos, que si la reina del carnaval,
bailábamos, jugábamos.
¿Alguna vez fuiste reina del carnaval?
MF: No,
yo no, mi hermano sí, porque era el más bello de todo el colegio,
entonces lo coronaban como el rey del colegio, pero a mí nunca me tocó
ser reina
del carnaval, yo hacia el discurso, a mí siempre me escogían para dar
los discursos, el día del padre, el día de la madre, siempre yo era
como la anfitriona por excelencia de todos los eventos del colegio y en
carnavales pues también.
¿Cuál fue tu disfraz favorito en la infancia?
MF: A
mí me gustaba muchísimo disfrazarme con el traje típico de la región
de donde son mis papás. Somos asturianos, entonces era una
ilusión muy grande porque además estábamos muy lejos de Asturias y uno
es como que muy temático con eso, entonces siempre me gustaba ponerme el
traje típico, de hecho ya después de grande me lo he puesto también.
¿Cuál fue el peor disfraz que te tuviste que poner?
MF: Uno
que me pusieron para bailar La Tarantela que no me gustaba para nada
(risas), me acuerdo en el colegio, no me gustaba, era como
incómoda la camisa, incómoda la falda. No lo detestaba, pero tampoco era
mi disfraz favorito.
¿El disfraz que nunca te compraron?
MF: Eso
está clarísimo, el de la Mujer Maravilla (risas). Esa es como la tarea
pendiente que me quedó. Si me dijeran, “te tenemos que
disfrazar de algo” sería de la Mujer Maravilla porque yo era así como
que la más fanática de ella y veía a todas las niñitas disfrazadas de
Mujer Maravilla y a mí nunca me compraron mi traje.
¿El disfraz que quisieras usar pero que jamás te atreverías a ponerte?
MF: Bueno
yo creo que ese, el de la mujer maravilla (risas) no tengo ninguna
limitación o ningún tabú. Una vez me disfracé de hombre y
esa historia es muy cómica porque yo no quería ir a la fiesta de
disfraces y una amiga mía me dice “tienes que ir”” vamos” yo no tenía
disfraz y me puse un traje de boda de mi papá y me acuerdo que le decía a
mi amiga: si yo consigo a alguien con quien bailar
vestida de hombre… ya tú me dirás. Y en la fiesta había un muchacho
disfrazado de mujer y lo más cómico es que no nos conocíamos. Cuando él
se presenta me dice: mucho gusto, me llamo Mónica y yo decía: ¿qué es
esto? (Risas). Fue muy cómico porque al final
pasamos toda la noche bailando yo de hombre, él de mujer y además él se
había puesto mi nombre. Siempre me acuerdo de eso.
¿La travesura más descabellada que hayas hecho en carnavales fue?
MF: No,
al contrario, a mí no me gustaba. Sabes que en los colegios de monjas
es típico que les caen a huevazos a las niñas y entonces
yo siempre salía por la ventana a decirles a los muchachos que no
hicieran eso, que podían lesionar a alguien. Y recuerdo que mis
compañeras cuadraban el escritorio de la profesora para que le cayeran
los huevos. Yo trataba de mediar con ellos para que no nos
lanzaran nada. Nunca me gustaron esos juegos de lanzar bombas de agua ni
nada de eso.
¿Alguna vez te echaron huevo en carnavales?
MF: Si
mil veces, mil veces... En el transporte era increíble, llegabas con la
camisa toda manchada, yo detestaba eso, huele, duele tenías como
nervios
de que no te agarraran, eran momentos tensos cuando uno estaba en el
colegio (risas).
¿Alguna vez estuviste en una guerra de bombas?
MF: De
repente en la casa los varones lo hacían, pero a mí no me parecía
divertido. Me gustaban mucho los papelillos, las serpentinas,
toda esa parte un poco más infantil, las carrozas. De chiquitica en
España me montaban en todas las carrozas de los carnavales, me
encantaban los caramelos y esas cosas así.
¿Eres de las que hacen bromas pesadas en carnavales?
MF: No,
yo no hago bromas pesadas, no me gusta asustar a la gente ni nada que
tenga que ver con violencia yo creo que más bien los carnavales
son para hacer cosas distintas.
Si te invito a una fiesta hoy... ¿De qué te disfrazarías?
MF: De
la mujer maravilla, porque yo creo que además definitivamente eso como
que le marca a uno la vida. Yo tenía una amiga que siempre
me decía que yo era como la Mujer Maravilla siempre me decía que los que
se ponen la ropa interior por fuera son los súper héroes y me decía,
“no te pongas la ropa interior por fuera” porque ella decía que yo
siempre estaba luchando por la justicia, ayudando
a la gente y después le dije: ¡fíjate el disfraz que nunca tuve!”
¿Un disfraz que jamás te pondrías?
MF: Lo
que no me pondría es algo que no se parezca a mí, que no vaya con mi
personalidad o que esté en contra de mis principios o de mis
valores. Jamás me disfrazaría de un asesino, de una persona que viole
los derechos de otra, de un presidente de un país que ahora está muy de
moda, la gente se disfraza hasta de Osama Bin Laden y de verdad que ¡de
eso no! de nada que vaya en contra de la paz.
Nunca lo haría.